MI EXPERIENCIA PERSONAL EN LA SUBLIMACIÓN Y LA SERIGRAFIA PARTE 1.
Actualmente la situación económica es complicada y muchos se preocupan únicamente por sobrevivir en su cotidianidad, la gente por comodidad o pereza no se atreve a realizar actividades extras o radicalmente dedicarse a otra cosa que no sea permanecer por horas en una oficina o fabrica.
Muchos nos hemos acercado a la elaboración de productos personalizados a través de diferentes técnicas, una de ellas es la sublimación. Hay vídeos tutoriales y comerciales de venta de maquinaria en los cuales nos explican de manera sencilla como se elaboran los artículos, uno se siente animado y se dice a si mismo: yo puedo hacer eso, se ve pinche fácil.... y aquí empezaré a hablar de mi experiencia personal:
Empecé viendo vídeos de como hacer tazas personalizadas, se veía todo muy sencillo y la inversión no era muy grande, lo primero que compre fue una impresora, hay que saber que no existen estas ultimas especializadas para sublimación, pero el sistema que marcas como Epson incluyen de sistema ecotank es ideal para utilizarla en el rubro. Un día caminando en un centro comercial ví la Epson L120 a un precio de aproximadamente 2100 pesos y al llevar dinero la compré sin dudarlo, llegué a casa y dije ahora necesito papel, tinta, cinta, tazas y una prensa, en ese momento pensé en ahorrarme el dinero de una plancha y utilizar mi horno doméstico con prensas manuales, dicho y hecho, al día siguiente acudí a comprar las cosas a la colonia Algarín con una sensación de no estar seguro de lo que hacía, llegaba a los locales y me sentía incluso avergonzado de no saber que pedir de manera precisa, compré la primera tinta para sublimación que encontré, cada 100 ml me costaron 80 pesos, acudí a un local distinto a comprar papel y la cinta térmica, los conseguí y ahí mismo compré mi primer lote de 5 tazas y una prensa manual, Llegué a casa y con miedo coloqué la tinta en la impresora que ya estaba instalada en mi PC, tardó como media hora en quedar lista para imprimir, tomé mi primera hoja de papel para sublimación y no sabía de que lado colocarla, ví algunos videos e intenté identificar el lado correcto, me dispuse a imprimir mi primer taza, precalente el horno, fui a mi PC, descargué una imagen de mi grupo de rock favorito y en mi mente creía que la gente al ver mi taza en facebook, se volvería loca y yo empezaría a vender sin parar, gran error, mi primera impresión salió excelente, coloqué el papel en la taza y con la prensa ya puesta metí el articulo al horno, esperé 3 minutos y fuí con incertidumbre a sacar mi primer taza, mi esposa me acompañaba, retiré la prensa, la cinta, levanté el papel y ..... un horror de impresión, me sentí muy desanimado, en ese momento ya no quise saber nada y francamente me sentí muy entristecido, el sentimiento no se me quitó todo ese día.
amaneció y aún con la espina del desanimo me dispuse a hacer una nueva taza mas cuidadosamente y... lo mismo.
En realidad sentí que había desperdiciado mi dinero, sentía un vacío y una desesperación que me hacía pensar en que ya me había chingado y ahora iba a tener que comprar una plancha, en esos días contaba con poco dinero y buscaba en páginas de segundamano una oportunidad de un equipo barato, siempre que busco comprar algo usado me doy cuenta que la gente siempre quiere vender sus cosas como si fueran nuevas y a parte recuperar los impuestos que pagaron en tienda, eso es desesperante, en fin, no me animé a nada.
Tomé un poco de dinero y me armé de valor para ir a Algarín de local en local hasta encontrar alguna plancha para tazas de menos de 1430 pesos que es lo que llevaba. Un local y otro y solo me hacían sentir peor, hasta que al fin increiblemente encontré un equipo nuevo en 1200 pesos, aun no acababa de explicarme el vendedor los detalles del equipo cuando ya le había dicho "me la llevo",
Al llegar a este punto ya había visto horas de videos en internet.... continuará----
2 Comentarios
me quede intrigado, que paso despues, ajaj
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